22 personas mueren por incendio en China tras un devastador siniestro en un restaurante de Liaoyang. Tres heridos completan el trágico balance. Las llamas, que envolvieron el local, surgieron en la cocina, donde se usaban fuegos abiertos tradicionales. Aunque las autoridades controlaron el fuego, no han aclarado su origen. Este suceso reabre el debate sobre la seguridad en establecimientos públicos y la necesidad de protocolos más estrictos.
¿Qué falló en la seguridad del local?
Las primeras investigaciones apuntan a deficiencias en las ignifugaciones, clave para retardar el avance del fuego. En muchos negocios chinos, estos sistemas son obsoletos o inexistentes. La falta de un certificado de ignifugación podría haber agravado la tragedia. Expertos señalan que, con medidas adecuadas, muchas víctimas se habrían evitado.
Respuesta de las autoridades
Tras el incendio, las autoridades prometieron investigar y castigar a los responsables. Sin embargo, como suele ocurrir en China, los detalles son escasos. Mientras, políticos locales visitaron el lugar, pero sin ofrecer soluciones concretas. La corrupción y la negligencia en el mantenimiento de infraestructuras siguen siendo problemas recurrentes en el país, donde los accidentes industriales son demasiado frecuentes.
