¿Es obligatorio tener extintores en una comunidad de propietarios?
En este país donde las normativas florecen como setas tras la lluvia, una cuestión que no cesa de aparecer en comunidades de vecinos, portales y reuniones interminables es esta: ¿es obligatorio tener extintores en una comunidad de propietarios?. Porque sí, uno puede vivir años en su piso sin ver una llama más allá de la cocina, pero cuando el fuego decide aparecer, lo hace sin pedir permiso. Y entonces, más vale tener un extintor a mano que quedarse viendo cómo todo se convierte en cenizas.
Lo cierto es que, desde que el Real Decreto 2177/1996 se coló en nuestras vidas, los inmuebles construidos o rehabilitados a partir de ese año están obligados a disponer de sistemas de extinción. Pero claro, no hablamos solo de tener uno tirado por ahí como adorno. Hablamos de equipamiento real, funcional, y en condiciones. Y si ha llegado el momento de comprar extintores, hay que hacerlo con cabeza, eligiendo bien el tipo, el tamaño y, por supuesto, el proveedor. Porque de la calidad de ese aparato puede depender mucho más que una inspección favorable.
Desde el Real Decreto 513/2017 —ese texto que todo administrador de fincas debería tener tatuado en la memoria—, se exige que los extintores estén situados en lugares accesibles, visibles, cerca de las salidas, y a una altura que no obligue ni a agacharse ni a subirse a una silla. La norma es clara: entre 80 y 120 centímetros del suelo. Además, no deben estar a más de 15 metros de cualquier punto del edificio. Nada de esconderlos en armarios ni detrás de plantas decorativas. Porque cuando hay fuego, no hay tiempo para buscar.
En este post podemos saber algo más sobre extintores extintores por metro cuadrado: estos dispositivos deben revisarse periódicamente, estar señalizados y responder al tipo de riesgo que hay en cada zona. No es lo mismo un extintor para fuegos eléctricos que uno para líquidos inflamables. Cada uno en su sitio, como debe ser. Porque prevenir no solo es mejor que curar: es más barato, más seguro y, en este caso, absolutamente obligatorio.
¿Qué requisitos deben cumplir los extintores en una comunidad?
No basta con comprar el primer extintor que nos ofrece el mercado. Es vital tener en cuenta el tipo de fuego más probable en el edificio. Para eso, existen diferentes modelos: para sólidos, para líquidos inflamables, para instalaciones eléctricas y para metales combustibles. Cada uno con su etiqueta, su presión adecuada y su eficacia garantizada.
El Código Técnico de la Edificación establece que debe haber al menos un extintor en cada planta del edificio y que ninguno de ellos debe estar separado más de 15 metros entre sí. Además, tienen que estar perfectamente visibles, cerca de salidas de emergencia, y señalizados para que hasta el más despistado pueda encontrarlos en un momento de caos.
¿Quién asume el coste del mantenimiento de los extintores?
Y ahora, llegamos a lo que más interesa a muchos: ¿quién paga todo esto? Pues como casi todo en las comunidades de propietarios, el coste recae sobre todos. Al estar instalados en zonas comunes, los extintores son responsabilidad de la comunidad en su conjunto. Eso significa que su compra, mantenimiento y sustitución se financian con las cuotas que todos los vecinos abonan regularmente.
Ahora bien, si algún vecino decide utilizar el extintor como juguete o como parte de una mudanza —cosas más raras se han visto—, entonces sí: deberá pagar los platos rotos, o mejor dicho, el extintor usado o averiado. Porque como en todo, el uso indebido conlleva consecuencias.
¿Qué sanciones existen si no se cumple con la normativa?
No contar con extintores, o tenerlos en mal estado, no solo pone en peligro vidas humanas. También puede acarrear sanciones económicas considerables. Las inspecciones periódicas de seguridad no perdonan y los seguros pueden negarse a cubrir daños si se detecta negligencia en la protección contra incendios. Por eso, no es solo una cuestión de legalidad: es una inversión en tranquilidad, seguridad y sentido común.
Ventajas de cumplir con la normativa de extintores en comunidades
Cumplir con la normativa no solo evita sanciones. También proporciona un entorno más seguro para todos los vecinos. Un edificio equipado correctamente es un lugar más protegido, y eso tiene un valor incalculable. Además, en caso de siniestro, contar con sistemas de extinción puede reducir significativamente los daños materiales y personales, facilitando una evacuación más rápida y eficaz.
Instalar y mantener los extintores es, en definitiva, una decisión que habla bien de una comunidad. Dice que se preocupa por sus habitantes, que cumple con la ley y que está preparada ante cualquier eventualidad. Y eso, en un mundo tan impredecible como el nuestro, es algo que todos valoramos.
Así pues, no se trata solo de si es obligatorio tener extintores en una comunidad de propietarios. La pregunta real debería ser: ¿cómo no vamos a tenerlos? Porque proteger a quienes viven bajo el mismo techo es, al fin y al cabo, una muestra de responsabilidad, civismo y sentido común. La normativa está para cumplirse, sí, pero sobre todo, está para proteger. Y en ese sentido, más vale pasarse que quedarse corto.
